Tormentoso Pasado

Capítulo V

 

La alarma que daba por terminado el desayuno en el instituto retumbaba con fuerza, de la cafetería se veía como salían todos los estudiantes a sus respectivas clases, toda la familia y amigos de Cassandra habían ido a ver el entrenamiento, era sor...       

La alarma que daba por terminado el desayuno en el instituto retumbaba con fuerza, de la cafetería se veía como salían todos los estudiantes a sus respectivas clases, toda la familia y amigos de Cassandra habían ido a ver el entrenamiento, era sorprendente todo el público que tendría el día de hoy.

Sus familiares ya estaban en las gradas del aula máxima, el pabellón inferior era donde se realizarían los entrenamientos, estaba lleno de una gran fila de sillas y de colchonetas, además de estar rodeado de estanterías para que los muchachos dejaran sus implementos; todo el equipo que Cassandra le había solicitado a Violet ya estaba en varias estanterías cerca de la que sería su oficina y sala de reuniones con su equipo.

Por la puerta del establecimiento empezaron a ingresar los estudiantes, que veían con asombro las graderías, quienes más quedaron impactados fueron sus familiares; ellos verían su humillación en aquella clase.

- ¿Qué demonios hacen ellos acá? - pregunto Lucia enojada.

-Créeme ellos no se van a perder este espectáculo- dijo Tyler - hasta yo estoy emocionado por ver cómo me humillan públicamente- dijo él riendo con terror.

-Muchachos enfoquémonos- dijo Mila nerviosa, lanzándole una mirada de reojo a su padre que le sonreía para tranquilizarla.

-Confirmemos nuestra llegada- dijo Trenton, todos se acercaron al lector de identidades, los maestros se ahorrarían llamar lista con estos aparatos, los estudiantes al entrar y al salir tenían que confirmar su identidad, con sus manillas de localización.

10 minutos después el aula estaba atestada de estudiantes de nuevo ingreso; había entre 50 y 60 estudiantes, el instituto a pesar de ser bastante amplio, no tenía una población estudiantil superior a las 300 criaturas, muchos porque habían desistido durante el camino o habían sido expulsados durante el transcurso del entrenamiento.

Las puertas del aula se abrieron dando paso a tres imponentes y muy sexys mujeres, Cassandra llevaba puesto un pantalón negro ceñido a su cuerpo, un top deportivo y un par de botas negras que complementaban ese estilo rebelde que siempre la acompañaba; detrás de ella ingresaron Samara y Andrea, con ropa deportiva muy ajustada, sus manos estaban vendadas y su cabello recogido en un par de coletas.

El aula entera quedó en silencio, mirando atentamente a la muchacha que en su interior reía a carcajadas al ver los rostros de terror, burla, y expectación de todos sus estudiantes.

-Samara pásame la lista de identificación y cierra las puertas quien no entró tendrá que atenerse a las consecuencias- dijo ella alzando su tono de voz, todos temblaron ante esas palabras, la joven tomó la memoria de la entrada, instalándola en una de las Tablet y entregándosela a Cassandra- todos están acá- dijo  con sorpresa- no se sentirme halagada o creer que son masoquistas y suicidas- Samara y Andrea soltaron una carcajada, dejando desconcertados a todos los estudiantes.

- Sigo insistiendo en que podemos huir- dijo Tyler mirando a su hermana mayor y su alma gemela- regresar al mundo humano no es tan mala idea- dijo en un susurro.

- Cállate ya Tyler- le ordeno Samantha- me pone de los nervios tu pesimismo- dijo mirando a nuestras entrenadoras.

-Me presento- dijo Cassandra con una sonrisa en su rostro- ya todos deben saber quién soy, mi nombre es Cassandra Marshall fundadora de Nightmare, señora del equilibrio, la muerte, o la peor pesadilla de algunos- dijo relajada apoyándose en el escritorio- tengo el placer y el honor de trabajar nuevamente en mi instituto y entrenar futuros cazadores que estarán bajo mis órdenes o las del honorable delta Robert Black que el día de hoy ha decidido acompañarnos- dijo la muchacha señalando hacia la gradería- démosle un gran aplauso.

El auditorio entero se llenó de aplausos y silbidos, Robert no era muy querido, pero sí muy famoso por su gran habilidad como cazador y guerrero de la manada, Cassandra terminada la sesión de aplausos y presentaciones, se dispuso a dar las reglas de juego, algunos enfocaban su atención en ella y otros simplemente la ignoraban.

-Espero que les quedara claro- dijo ella estirando sus brazos- quien no esté de acuerdo bien puede largarse o atenerse a las consecuencias ¿alguna pregunta? - dijo examinando el salón.

-Que seas una poderosa mujer no te da derecho a tratarnos como quieras- dijo una de las muchachas, una de las hijas de los concejales.

-Oh cariño- dijo Cassandra riendo- creo que tú serás la primera el día de hoy- dijo ella, Samara y Andrea soltaron fuertes carcajadas; en la gradería los amigos de Cassandra se aguantaban los deseos de reír- me divertiré mucho contigo este año y medio- dijo con la sonrisa de toda una cazadora en busca de su presa.

-Igual entre nosotros están los futuros alfas- dijo la muchachita soltando un suspiro de añoranza- ellos te darán una gran lección de lo que debe ser un entrenador- dijo la niñita y Connor y Travis palidecieron, ellos preferían aguantarse las ganas de demostrar su poder.

-Oh eso es fantástico- dijo Cassandra con burla- ¿por qué no lo intentan chicos? - dijo Cassandra retirando su chaqueta- ¿por qué no intentan darme una lección? - pregunto y el par de alfas negaron nerviosos.




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