Dime que te quedarás (amor a lo Escocés #1)

Capítulo 44: Una petición

― Amor por qué no has... ―la voz de Aiden murió al entrar a la habitación, alcé mi vista sobresaltada al verlo pero su concentración estaba fija en el desastre que era mi cuarto ― ¿qué estás haciendo?

Su mirada pasó desde la ropa que estaba en la cama hasta el closet que se encontraba abierto y vacío y finalmente se encontró con las maletas que estaban abiertas en el suelo a medio llenar. Su rostro palideció

― ¿Estás haciendo maletas? ―casi susurró. 

Asentí pero sus ojos seguían fijas en las maletas, como si estuviera analizándolas, luchando por comprender. Su rostro me recordó a la de un niño perdido. Unos segundos después su mirada se encontró con la mía, tragué saliva preparándome para lo que estaba por venir.

Aiden tomó una respiración profunda y juntó sus cejas. 

—Tus cosas están empacadas. Todas tus cosas

—Lo sé —dije.

— ¿Te vas? —preguntó derrotado.

Asentí otra vez

El aire se escapó de sus pulmones y dio un paso atrás como si hubiese perdido el equilibrio

― N... No entiendo

― Me voy en dos días Aiden, tengo que empacar las cosas ―me sorprendí a mí misma ante lo estable que sonaba mi voz

― Pero tú... ―sacudió su cabeza― yo pensé que habías accedido, que habías aceptado quedarte

― Yo nunca te dije que sí

La sorpresa se vislumbró en sus ojos

― ¿estás hablando en serio? ―no respondí― ¡Me dijiste que me amabas! ―sonó como una acusación.

― Lo hago

― ¿Y aun así te vas a ir? ―Asentí. Sus hombros cayeron― Cómo puedes... ¿y lo que pasó anoche?  ¡Hicimos el amor, Fabiola! Hiciste el amor conmigo, no puedes... No puedes solo acostarte conmigo y después irte. ―su voz se rompió― No puedes hacerme esto

Aparté mi mirada sin soportar ver el dolor que yo estaba provocándole

― Lo que sucedió anoche significa todo para mí, fue maravilloso, fue perfecto. Yo... jamás me había sentido de esa forma antes, fue la mejor noche que he tenido en mi vida pero... ―mi labio tembló― Tú sabías, tú sabes que me tengo que ir. No puedo quedarme aquí, por favor entiéndeme

― ¿Entenderte? Eso es lo que he hecho, todo este tiempo. Lo único que he hecho es entenderte, entender tus razones, intentar, querer hacerte feliz pero entiéndeme tú a mí también, si te vas... Me estas rompiendo el corazón

Mi corazón se estrujó y sangró

― No estas siendo justo conmigo.

― Tú eres la que no estas siendo justa, me dijiste que me amabas y dormiste conmigo. Yo pensé que eso significaba que habías cambiado de opinión, que aceptabas mi proposición y resulta que no, que aun así te vas a ir, como si mis sentimientos no importaran. ¿Tienes alguna idea de lo que estás haciéndome?

― Por favor no hagas como si fueras el único sufriendo aquí, a mí también me duele

― Parece como si esto fuera muy fácil para ti ―mis ojos se hicieron agua, las lágrimas amenazaron con salir. Aiden se acercó a mí― No te vayas mi amor, por favor. Quédate aquí

Sacudí mi cabeza ― No puedo 

― ¡Si puedes! Maldita sea que si puedes, lo único que tienes que hacer es decir que sí. ―sus ojos vieron dentro de mí y lo que encontró no le gustó― pero no quieres ¿cierto? No quieres quedarte, ese el problema. No importa lo que yo diga o lo que haga tú no te vas a quedar, sin importar qué, te vas a ir.

― ¿Qué quieres que te diga?

― Quiero que me digas que te quedarás ―suplicó. Su expresión era agonizante

Negué

― ¿Para qué sigues pidiéndolo si ya sabes la respuesta? ―tomé una respiración― Aiden escúchame, allá esta mi hermana y mi mama, están todos mis amigos, mi familia, mi vida. No puedo ni quiero dejar eso. No quiero quedarme aquí

Aiden dio un paso atrás como si hubiese recibido una puñalada.

― Tus amigos, tu familia  ¿Y yo qué? ¿Yo no cuento? ¿No significo algo que tomar en cuenta en tu vida?

― No puedes pedirme que me quede solo para poder estar contigo, no puedo dejar toda mi vida allá solo para estar contigo, no puedo dejar todo por...

Sus rasgos se volvieron duros

― Por un hombre, dilo. Termina tu frase. No puedes venirte para acá por un hombre, por mí. Porque yo no represento una fuerza de peso en tu balanza lo suficientemente grande para que te quedes.

Juro que pude escuchar el momento exacto en el que mi corazón dejó de ser un organismo entero.

― Es la verdad. ―susurré― Por más que este enamorada de ti, por mucho que te ame y que no te quiera dejar, que no quiera terminar esta relación, no es suficiente. Te amo tanto Aiden, te metiste tanto en mí, en mi vida durante estos meses, es como si... es como si fueras una parte de mí que no sabía que tenía... Que me vaya no significa que no te ame, que lo que siento por ti no es real, por favor no pienses eso, porque lo que tuvimos tú y yo fue lo más hermoso que me ha pasado



#113 en Joven Adulto
#2292 en Novela romántica

En el texto hay: humor, drama, amor

Editado: 13.11.2019

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.